Se trata de un nuevo procedimiento basado en el conocido peeling a base de ácido tricloroacético (TCA), y que, gracias al descubrimiento de su combinación con peróxido de hidrógeno penetra muy rápidamente en la dermis, activando todo un proceso regenerativo y sin agredir a la epidermis.
En el PRX-T33 se combina el TCA (ácido tricloroacético) al 33% sobre el que se sustentan los peelings con ácido kójico y agua oxigenada. En esta fusión hallamos la novedad de este tratamiento: mecanismo de acción del agua oxigenada combinada con el TCA, minimiza los efectos agresivos del peeling (frost o exfoliación de la dermis), estimulando la dermis de manera no invasiva.
El PRX-T33 favorece la estimulación de los fibroblastos y los factores de crecimiento sin generar inflamación ni dañar la piel. Además, este tratamiento puede realizarse en todas las épocas del año, contrariamente al peeling, debido a que no es fotosensibilizante, y es adecuado para todo tipo de piel.