La sudoración excesiva en las axilas supone un problema para muchos/as pacientes que ven afectada su calidad de vida y, en ocasiones, sus relaciones sociales y laborales. El tratamiento de la Hiperhidrosis con Toxina Botulínica Tipo A es efectivo en un 90 % de los casos y supone un gran alivio para ellos/as. 

Se trata de un procedimiento rápido, seguro, efectivo y sin complicaciones.

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Tratamiento

Pequeñas infiltraciones debajo de la piel de las axilas con agujas muy finas.

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Dónde

Se realizan en consulta. De forma ambulatoria.

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Anestesia

Habitualmente solemos aplicar una crema anestésica en las axilas 45 minutos entes del procedimiento.

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Recuperación

Incorporación inmediata. Puede producirse algún mini hematoma, como una lenteja, en algún sitio de punción.

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Resultados

El efecto empieza a los 2 días y es máximo a los 7 días

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Duración

Más de 6 meses

Información adicional

 

La sudoración excesiva (hipersudoración) o hiperhidrosis no tiene un impacto únicamente estético, sino que está relacionado con la higiene y la calidad de vida. Los y las pacientes que sudan de manera exagerada sufren un problema que puede terminar por condicionar su vida diaria obligándoles a vivir permanentemente pendientes del continuo sudor que producen en sus axilas y en sus manos. La sensación de estar permanentemente húmedo, el mal olor que frecuentemente se relaciona y la necesidad de cambiar la ropa varias veces al día son algunas de las preocupaciones que nos muestran este tipo de pacientes. En algunos casos el cuadro clínico se puede complicar con una maceración excesiva de la piel que puede terminar provocando incluso infecciones.

Hipersudoración o hiperhidrosis

Existen multitud de tratamientos tópicos como la iontoforesis o la toxina botulínica, algunos medicamentos orales (anticolinérgicos, bloqueadores a-adrenérgicos), y tratamientos quirúrgicos como la simpatectomía lumbar. Normalmente no se muestran efectivos ante hipersudoraciones excesivas.

La infiltración con toxina botulínica tipo A (bótox) se usa para el tratamiento de la hiperhidrosis primaria con una excelente eficacia, seguridad, buena tolerancia y facilidad de aplicación, mejorando la calidad de vida del paciente.

El sudor es producido por las glándulas sudoríparas. Éstas se acumulan principalmente en las axilas, cara, palmas de las manos y palmas de los pies. Para poder expulsar el sudor las glándulas sudoríparas necesitan la contracción de un pequeño músculo que se encuentra en los folículos pilosebáceos. Ahí es donde actúa el bótox, impidiendo que esos músculos se contraigan y se libere el sudor.

El tratamiento es realmente sencillo y consiste en realizar infiltraciones superficiales con toxina botulínica diluida en la zona cuya sudoración queramos disminuir. Las axilas y la cara son las zonas más frecuentemente tratadas, siguiéndoles de cerca las palmas de las manos y las plantas de los pies.

En las axilas y en la cara utilizaremos una crema anestésica que aplicaremos 1 hora antes del procedimiento. Gracias a ello conseguiremos disminuir la sensibilidad cutánea haciendo el tratamiento muy tolerable. En las palmas de las manos y las plantas de los pies la sensibilidad es mucho mayor por lo que la crema puede ser insuficiente para algunos pacientes. En estos casos podemos realizar bloqueos anestésicos con anestesia local.

A los dos 2 días el paciente empezará a notar el efecto del tratamiento que se prolongará durante más de 6 meses.